Una prueba de paternidad hace que la estructura familiar se resquebraje. ¿En qué consiste una familia? Una certeza científica rompe la seguridad, la confianza y el supuesto amor que sustentan un grupo.
Es fácil encender y destruir a un hombre a quien carcomen las dudas, un hombre que se enfrenta a una verdad cuando todo a su alrededor se construye con mentiras. ¿Cómo vivir con la mentira? Y, ¿cómo vivir con la verdad?
Tragedia contemporánea, herencia de Shakespeare. Como en los mejores clásicos, acontecimientos humanos que hablan de comportamientos humanos. Las pasiones que dominan las acciones del ser: La envidia descarnada, la necesidad brutal de afectos, la búsqueda de la felicidad, la ambición, los políticos arribistas, el amor y la frialdad, el sentido del humor, la risa, la brisa, la prisa… Una farsa que no logra cubrir la tragedia.
> Su principal personaje Peter Korach experimenta, que la verdad a veces es muy corta, y que ignorar a veces es mejor, que poseer el frío conocimiento de haber sido engañado. <
Frankfurter Allgemeine Zeitung
SOBRE
LA PRUEBA
Este texto, de escritura contemporánea, cercano a los actos y comportamientos de nuestros más cercanos aconteceres, nos pareció llamativo por su conexión íntima con los temas clásicos, y con las formas trágicas.
El arranque de la obra nos lleva a pensar en Otelo; una fuerte dosis de desconfianza entre los hombres: recelos, envidias y traición, condenan a los hombres a ser víctimas de sí mismos, pero inevitablemente, su levedad no nos permite, o parece no permitirnos, romper los atavismos; sabiendo además, como sabemos, cuál será nuestro final… que no nuestro fin.
La razón de ser (o de no ser) del hombre, está guiada por Lukas Barfus de forma magistral, colocando a los personajes en situaciones extremas (in extremis), dotadas de sentido del humor a la par que de sentido común, a través de un caleidoscópico objetivo que enfoca los acontecimientos más cotidianos de nuestro entorno en un marco (estilo) bien definido. Magma de emociones, lo que nosotros consideramos puntos de vista, red de relaciones que no nos dejaran indiferentes.
El trayecto es de tan fina dramaturgia que no nos suelta desde los primeros trazos. ¿Qué va a pasar ahora? ¿qué va pasar ahora?, ¿qué vamos hacer, entonces?.
¿Y la aventura dónde está? Barfuss nos hablaba así en Madrid, hace tres años; de la aventura como eje de sus obras, de su pensamiento, de su vida. Como gran transgresor que es, hacía de la aventura una visión o quizás revisión, nada convencional, de efectos sorpresivos.
¿Para cuándo la aventura?, sin esa premisa no quiere escribir. Esa simple forma es la garantía de que la escritura vibra en cada parlamento. Y nosotros creemos que la aventura está garantizada. Los personajes desde la palabra, buscan los cuerpos de los intérpretes y del público, y su lenguaje está atravesado por el pensamiento contemporáneo y sus ritmos vitales.
Ese es el fin de nuestro buen principio, de nuestra aventura. Mientras haya aire de frente el barco navegará a buen ritmo (en palabras de Bärfuss). Y que no se nos olvide respirar.
Carmelo Gómez y Emi Ecay